Dermatitis atópica en perros: recomendaciones para su cuidado y tratamiento
La dermatitis en perros, especialmente la dermatitis atópica, es una preocupación creciente entre dueños responsables. Esta enfermedad afecta no solo la salud física de la mascota, sino también su bienestar emocional. En este artículo te comentaremos qué es, por qué ocurre, cómo prevenirla y las opciones de tratamiento, con un énfasis en el uso de Apoquel, un medicamento ampliamente utilizado.
Tabla de contenido
- ¿Qué es la dermatitis en perros?
- ¿Qué es la dermatitis atópica en perros?
- ¿Cómo puedo prevenir la dermatitis atópica en perros?
- Diferencias entre dermatitis “normal” y dermatitis atópica
- ¿Es lo mismo dermatitis alérgica que atópica en perros?
- Tratamientos comunes para la dermatitis en perros
- Riesgos y monitoreo de usar Apoquel
- Conclusión
¿Qué es la dermatitis en perros?
El término “dermatitis” es amplio; simplemente significa inflamación de la piel. No siempre implica una alergia.
- Puede ser dermatitis alérgica, dermatitis de contacto, dermatitis por pulgas, entre otras.
- Los síntomas comunes son: picor, enrojecimiento, erupciones, costras, pérdida de pelo, lamido constante.

¿Por qué da dermatitis en perros?
Algunas causas frecuentes de dermatitis en perros:
- Pulgas: la dermatitis alérgica por pulgas (DAPP) es muy común.
- Alergias ambientales: como la atópica.
- Alimentos: perros pueden ser alérgicos o intolerantes a ciertos ingredientes.
- Parásitos o infecciones: ácaros (sarna), bacterias o hongos pueden desencadenar dermatitis.
¿Qué es la dermatitis atópica en perros?
La dermatitis atópica canina es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel, asociada a una respuesta inmune exagerada a alérgenos del entorno (como pólenes, ácaros o moho). Se caracteriza por picazón (prurito), enrojecimiento, lesiones en la piel y a menudo infecciones secundarias.
- Mecanismo: En perros atópicos, ciertas citocinas proinflamatorias se activan de manera descontrolada; estas señales provienen de células del sistema inmune y contribuyen al prurito y a la inflamación.
- Diagnóstico: Se basa en la historia clínica, examen dermatológico, pruebas de exclusión (alergias alimentarias) y, en algunos casos, test de alérgenos.

¿Por qué les da dermatitis atópica a los perros?
La dermatitis atópica no es causada por un solo factor; se trata de una interacción compleja entre genética, ambiente e inmunidad:
- Factores genéticos: Algunas razas tienen predisposición.
- Alérgenos ambientales: Polen, ácaros, moho, hongos, hongos de levadura.
- Disfunción de barrera cutánea: La piel de estos perros no retiene bien la humedad y se vuelve más permeable a alérgenos.
- Sistema inmune: Responde de forma exagerada a estímulos “inocuos”, con liberación de mediadores inflamatorios.
¿Cómo puedo prevenir la dermatitis atópica en perros?
Prevenir completamente la dermatitis atópica puede ser difícil, pero sí puedes reducir el riesgo o minimizar los brotes con estas estrategias:
- Higiene regular: baños con champús suaves y enriquecidos en lípidos para mantener la barrera cutánea.
- Control ambiental: reducir los alérgenos en casa (limpiar polvo, usar filtros, lavar la ropa de cama del perro).
- Alimentación adecuada: dietas de alta calidad que promuevan la salud de la piel y el sistema inmune.
- Suplementos: ácidos grasos omega-3/6, si el veterinario lo recomienda.
- Monitoreo veterinario: revisiones periódicas para detectar señales tempranas y tratar infecciones secundarias.
Diferencias entre dermatitis “normal” y dermatitis atópica
- Dermatitis “normal” o inespecífica: puede deberse a pulgas, irritantes o infecciones; suele ser más localizada y esporádica.
- Dermatitis atópica: es una condición crónica, más generalizada, y requiere un enfoque inmunológico y a largo plazo.
¿Es lo mismo dermatitis alérgica que atópica en perros?
No exactamente, aunque a veces se usan como sinónimos:
- Dermatitis alérgica: término general para cualquier inflamación de la piel causada por alergias (pulgas, alimentos, contacto, inhalantes).
- Dermatitis atópica: es una forma específica de dermatitis alérgica, generalmente ligada a alérgenos inhalados y con un componente genético e inmunológico.

Tratamientos comunes para la dermatitis en perros
Aquí es donde empezamos a hablar sobre Apoquel (principio activo: oclacitinib). Y también otras estrategias:
1. Tratamiento farmacológico con Apoquel
- Apoquel® es un inhibidor selectivo de la Janus Quinasa tipo 1 (JAK1), que modula las señales inmunes responsables del prurito y la inflamación.
- Dosis: la pauta habitual es 0,4–0,6 mg/kg por vía oral dos veces al día durante 14 días, seguido por una dosis de mantenimiento una vez al día.
- Presentaciones: existen tabletas de 3,6 mg, 5,4 mg y 16 mg.
- Inicio de acción: alivio del picor en pocas horas (se reporta mejora en 4 h).
- Precauciones: no se recomienda usar en perros menores de 12 meses o con infecciones graves.
- Efectos adversos: puede aumentar la susceptibilidad a infecciones, por lo que se recomienda monitoreo si es uso prolongado.
2. Otros tratamientos y estrategias
- Corticoides: en algunos casos, pero con más efectos secundarios a largo plazo.
- Inmunoterapia: vacunas alergénicas si se identifican los alérgenos específicos.
- Medicamentos tópicos: champús medicados, lociones, emolientes.
- Tratamientos adjuntos: antibióticos o antifúngicos, si hay infecciones secundarias.

Riesgos y monitoreo de usar Apoquel
Como clínica veterinaria, le comentamos a los dueños que puedan estar leyendo nuestro artículo que, aunque Apoquel es muy efectivo, requiere vigilancia y control veterinario:
- Realizar análisis sanguíneos periódicos en tratamientos prolongados para vigilar la función inmune, hepática o renal.
- Evaluar la aparición de infecciones recurrentes, papilomas u otros signos de inmunosupresión.
- Ajustar la dosis según la respuesta clínica y la gravedad de la dermatitis.
Conclusión
La dermatitis atópica en perros es una enfermedad crónica, pero con un manejo adecuado se puede mejorar significativamente la calidad de vida de tu mascota. Te recomendamos un enfoque integral: prevención (control ambiental, buena higiene), tratamiento farmacológico (como Apoquel cuando esté indicado) y monitoreo constante.
Si observas que tu perro se rasca excesivamente, tiene enrojecimiento persistente o lesiones recurrentes, te recomendamos visitar nuestra clínica, donde te brindamos la especialidad de dermatología para tu mascota. Él especialista podrá orientar un diagnóstico correcto y definir si un tratamiento con ocacitinib (Apoquel) u otras opciones es lo mejor para tu fiel compañero.
